martes, 22 de enero de 2008

Plan de Salvación Con Colores

1- Esta bolita color de ORO nos recuerda del cielo.

¡La Biblia nos dice que el cielo tiene una calle de oro! Pero lo mejor acerca del cielo es que Dios quien te creó a ti y a mí vive allí. La Biblia, la palabra de Dios, dice: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” (Juan 3:16) Jesús, Dios el Hijo, está en el cielo preparando un lugar para todos los que confían en El. (Juan 14:2-3) Dios es santo y perfecto. El no puede permitir ninguna cosa en el cielo que no sea perfecta, así que hay una cosa que nunca puede estar en el cielo. ¿Qué será? ¡Es el pecado!


2- De eso nos recuerda esta bolita OSCURA.

El pecado es cualquier cosa que hacemos, decimos o pensamos que no agrada a Dios, como mentir, engañar, ser egoísta, o lastimar a otros. La Biblia dice: “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.” Romanos 3:23 ¡Todos quiere decir grandes o pequeños, jóvenes o viejos! No importa dónde vives o quién eres, tú has pecado. Todos nacemos con un “deseo” de hacer lo malo. Dios dice que es necesario castigar el pecado (Romanos 6:23), y que el castigo por el pecado es ser separados para siempre de Dios en un lugar de sufrimiento...un lugar que se llama infierno. ¡Pero Dios tiene un plan maravilloso para que no tengas que se castigado por tu pecado! Dios envió a Jesucristo, su Hijo perfecto, para nacer como un bebé. Jesús vivió una vida perfecta. El nunca pecó. A la edad de 33 años, hombres malvados lo clavaron en una cruz.

3- Esta bolita es ROJA recordándonos de la sangre de Jesús.

La Biblia dice que sin el derramamiento de sangre no hay perdón del pecado (Hebreos 9:22). Así que Jesucristo voluntariamente murió para tomar el castigo por tu pecado. “...Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras.” 1 Corintios 15:3,4 Ahora, por lo que Jesús hizo por ti, puedes recibir perdón por tus pecados. ¡Sigue leyendo para ver cómo! La Biblia dice: “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.” Juan 1:12

4- La bolita BLANCA nos recuerda de un corazón LIMPIO. ¿Cómo puedes tener un corazón limpio? Debes: Confesar a Dios que eres un pecador y que quieres apartarte de esos pecados.

Creer en Jesucristo, que El es Hijo perfecto de Dios, que murió por tu pecado, que fue sepultado y que resucitó de los muertos. Clamar (Pedir, Invocar) a El para que te salve de tu pecado. ¿Quieres hacer esto ahora mismo? El ha prometido escuchar, y una vez que eres su hijo El nunca te dejará (Hebreos 13:5). Toma un momento y habla con Dios ahora mismo. El cambiará tu vida para siempre. ¡Sólo hay un color más! ¿Qué pudiera representar?

5- El VERDE representa las cosas que crecen. Cuando pides a Dios que te perdone y te salve, El te hace su hijo. Dios quiere que le conozcas mejor y que crezcas para llegar a ser más como El. Hay cuatro cosas que te ayudarán a crecer: 1. ORAR (hablar con Dios diariamente) 2. LEER Y OBEDECER LA BIBLIA (para saber lo que El dice, y entonces hacerlo) 3. HABLAR CON OTROS ACERCA DE JESÚS 4. ASISTIR A UNA IGLESIA QUE CREE EN LA BIBLIA (donde aprenderás más acerca de cómo agradarle) Como un hijo de Dios, si pecas de nuevo, detente y dile lo que has hecho. El promete en su Palabra... “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” Juan 1:9 ¡Pide a Dios que te ayude a vivir una vida que le agrade!

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No somos propietarios de los derechos de este artículo. Tomado y ampliado de diversas fuentes.

PLAN DE SALVACION

Plan Sencillo Para La Salvación Del Pecador. (El Camino En Romanos)

1. Uno debe saber que es un pecador.

Romanos 3:10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno

Romanos 3:23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.

2. Hay un precio por el pecado - muerte e infierno

Romanos 5:12 Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

Romanos 6:23a Porque la paga del pecado es muerte...

3. Jesucristo, el hijo de Dios, ha pagado ya el precio de nuestros pecados por completo, muriendo en nuestro lugar como nuestro substituto.

Romanos 6:23b mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

Romanos 5:8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.

4. Puedes ahora ser salvo recibiendo a Cristo como tu Señor y Salvador.

Si lo invitas sinceramente, él ha prometido salvarte

Romanos 10:9-13 Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado. Porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan; porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.

SEIS PASOS PARA LA VICTORIA EN LA VIDA CRISTIANA

1. Sean fieles a la casa de Dios (Hechos 2:46 - 47; 10:25 Hebreos).

Estar en iglesia cada vez que las puertas están abiertas. Conseguir todos lo que puedes de los sermones, la escuela de domingo, el estudio bíblico, etc.


2. Estudia la Palabra de Dios regularmente, y guárdala en tu corazón (Salmo 119:11; I Pedro 2:2).


3. Orar sin cesar. (I Tesalonisences 5:17; Isaías 40:31)

Comienza tu día con oración y termínalo con oración. Orar sobre pequeñas cosas así como por las cosas grandes.


4. Entrega tu voluntad absolutamente a Dios, y obedécelo en todas las cosas (Hechos 5:32).


5. Aprende a dar abundantemente y fielmente (II los Corintios 9:6 - 8; Malaquias 3-10).

Diezmar y ofrendar es la inversión más grande que podemos hacer. No sólo aquí y ahora trae bendiciones, sino que será visto otra vez con interés y aumento múltiples en el cielo.


6. Trabaja para Cristo y continua trabajando para Cristo (Mateo 9:37 - 38)